SENTIR

Estamos en pleno invierno, el tiempo nos invita al recogimiento, a entrar dentro de nuestras casas, para buscar el calor de esas cosas,  que nos trasladan a nuestros recuerdos.

No es por casualidad que el día 14 de febrero sea el día de los enamorados, decir que no soy ningún fan de este día, aunque si un fan de estar enamorado, que te invita a sentir, a pasar el domingo tirado en tu sofá, tapado con una mantita sin hacer nada, en compañía de esa o esas personas que amas.

Que pena que no tengo chimenea,  sino este domingo hubiera sido redondo,  “sentir”, entiendo que es esa cualidad, por la cual nuestros sentidos hacen que dentro de nosotros suceda algo diferente, que nos conmueve y nos lleva a estar en uno u otro estado de ánimo.

Sentir te hace conmoverte, alegrarte, salir de uno mismo para estar en los demás o entrar dentro de ti mismo,  te hace sonreír, llorar, entristecerte, te hace pensar, rezar, meditar, cantar, tener miedo, … te hace “sentirte” mas vivo que nunca.

Acordaros cuando diseñáis un evento de visualizar el sentimiento de cada momento,  un atardecer, el calor de ese preciso instante, la música que sale sin que nadie la esperara en mitad del desierto,  el frió de un enorme glacial, que nos habla en su estremecimiento, la cara de unos niños que nos reciben en su colegio, llenos de alegría con sus incansables juegos,  el sol de las Toscana, paseando en vespa por sus increíbles viñedos, la sonrisa de la pobreza con su total desprendimiento, … hemos hecho realidad tantos sueños.

No puedo más que dar las gracias a este mundo de los eventos,  que ahora me permite viajar solo con mis pensamientos y como dice el poema “…que con venir de mi mismo, no puedo venir más lejos”.