La consciencia de lo prescindible “Low cost events”

Dentro de “nuestros” eventos, siempre me ha llamado mucho la atención, la desproporción y a veces la incoherencia, entre el objetivo perseguido y la inversión en las diferentes partes de un evento…

Si busco por ejemplo dentro de un evento, un viaje de Incentivo como objetivos: “fidelizar, sentido de pertenencia a la compañía y transmitir valores de marca”, ¿dónde debemos invertir nuestro presupuesto dentro del mismo?

1.- ¿En la categoría del hotel, comidas, coktails,…?

2.- ¿En la comunicación antes, durante y después del evento?

3.- ¿En la categoría de los speakers que van a transmitir el mensaje?

4.- ¿En las actividades experienciales que reforzarán la consecución de los objetivos?

5.- ¿En los valores creativos del mismo?,….

6.- ¿En los transportes a utilizar…?

7.- ¿En buscar un destino coherente al presupuesto?

8.- ¿En,…?

Como os decía muchas veces he visto verdadera descoordinación e incoherencia entre el objetivo y la respuesta a las preguntas anteriores.

Y ahora en estos momentos de “oportunidades”, (me cuesta mucho la palabra “crisis”), veo como se habla del LOW COST en los eventos, y resulta que este LOW COST, podríamos definirlo como: “Conseguir un breafing mucho más concreto y conciso de los objetivos, dar la oportunidad a que cada euro este mucho más enfocado a la consecución de los mismos, permitir que seamos creativos a la hora de ofrecer diferentes servicios antes inimaginables por su bajo coste y eliminar todo lo superfluo”.

Por mi parte bienvenido sea este LOW COST EVENTS, y que una vez pasada esta crisis, este aprendizaje, nos dure muchos años.