Women’Secret night: un evento-desfile entre máscaras
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El leitmotiv de la noche, La Máscara, estaba presente en todo momento, tanto en la decoración, en detalles del catering o en el personal. Por ejemplo, a la entrada se optó por darle una vuelta a las clásicas catenarias que marcan los accesos, y se produjeron unas que tenían máscaras en el extremo, quedando a una altura de 1,80 para que todos pudieran hacerse fotos con ellas. A continuación se cubrió la entrada de negro con las paredes en oro en efecto espejo, creando un juego de reflejos y movimientos que llevaban al photocall. Este consistía en una caja de espejos en tono oro en la que una de las paredes era una pantalla de leds donde se lanzaba un vídeo creado en especial para el evento con imágenes de bailes de máscaras en formato caleidoscopio, junto con gráficos y motivos que seguían este mismo hilo conductor de las máscaras. Los visuales cambiaban de forma dinámica para que los asistentes pudieran posar y tener varios fondos y mensajes en cada fotografía que se hacían.
Este photocall de 10×6 ocultaba las características palmeras de la sala La Riviera y articulaba el espacio en dos zonas diferenciadas: esta primera de photocall y otra en frente con la imagen de la campaña de Elsa Pataki. Además de la campaña de comunicación, había que dejar un espacio destacado para la presentación Limited Edition 2017 y un avance de la colección de verano. Para ello era necesario montar una pasarela, en este caso elevada a 1,40 de alto y sobresaliendo del escenario de la sala, cuyo frontal se forró con espejos dorados con el objetivo de que el público sentado se viera reflejado en ellos.
El juego de reflejos también sirvió para adaptar la escenografía a cada colección que se presentaba. Por ejemplo, se diseñaron unos soles de oro que acompañaban el aire tropical y caluroso del desfile de la colección de verano, pero que a su vez reflejaron tonos plateados en el momento de la presentación de la lencería y corsetería. Por su puesto, en el escenario no faltó tampoco el icono de la noche: una gran máscara de cuatro metros de altura que se integraba con el nombre de la marca en un luminoso de neón durante el desfile y el fondo de pantalla del escenario que mostró el vídeo de la campaña en la presentación del evento.
El desfile se cerró con una explosión de serpentinas de oro que cayeron en la pasarela y el escenario como láminas de oro. El toque glam perfecto para que arrancara a fiesta y el cóctel. La restauración corrió a cargo de Cari Goyanes quien personalizó el servicio con la temática de las máscaras. Los camareros tuvieron su lado glamuroso con lazos dorados, los cupcakes y el pastel tuvieron la paleta de colores del evento y en la puesta en escena del catering no faltaron las máscaras y las plumas.