Usana vuelve a los eventos presenciales, ¡y qué bien sabe!
Compartir noticia
Escuchar
La marca de productos de salud y nutrición que funciona con un modelo de venta directa, tiene que cuidar especialmente la motivación, la formación, el espíritu “de empresa” de sus distribuidores independientes. Y esto se hace en eventos. “Necesitamos de eventos porque es donde podemos medir el pulso de nuestros asociados, conectar con ellos y demostrarles lo que su trabajo significa para nosotros, los asistentes plasman lo que sienten por la empresa. Es una simbiosis potente, se consolida la relación de tú a tú”, comenta. Un momento de alineamiento muy valioso entre empresa y distribuidores.
En este caso se trataba de un evento de premio a 60 distribuidores. Estuvieron en Marbella Hotel H10 Andalucía durante dos días. El evento empezaba con una bienvenida con recepción. Al día siguiente, actividades (visitas de mercadillos, paseo por Puerto Banus, visita guiada de la ciudad, y opción de realizar actividades deportivas al aire libre), antes de ver una demostración de paella y almorzar en el restaurante. Siguió la formación en los espacios que marcaba el hotel, con presencia de un conferenciante externo. Por la noche, cena de gala con las mismas medidas de prevención (“que no significan que no se pueda disfrutar de hacer networking y compartir momentos muy especiales”, según Nacho). Y el día 2, se presentaba un nuevo producto con su correspondiente formación, noticias y, sobre todo, un enorme aplauso a los asistentes por haber participado y haber trasmitido tan buena energía los unos a los otros.
“Un evento de este tipo es mucho más seguro que nuestro día a día. El hotel y demás proveedores siguen a rajatabla todos los protocolos sanitarios, etc. Se dividieron los asistentes en pequeños grupos para todas las actividades, el único momento de plenaria era la presentación en el hotel. Esto permitía gestionar el encuentro con una prudencia sanitaria extrema. Las comidas y cenas se hacían en mesas de 6. Todo el mundo llevaba la mascarilla. Incluso, por prudencia sanitaria, algunas cosas no se pudieron hacer, por ejemplo un teambuilding de preparación de paellas se tuvo que modificar a una exhibición comentada de preparación de la paella”, nos cuenta Nacho.
¿Esto supone muchos sacrificios en la experiencia del asistente? “No, la experiencia ha sido cómo necesitábamos: necesitábamos simplemente vernos, escucharnos, compartir, y hacer esto con distancia no supone perder esta emoción del contacto directo. Nos miramos a los ojos e intercambiamos mucho… ¡aunque sea sin abrazarnos!”, añade Nacho. “La gente estuvo encantada. Tuvimos a 60 personas de dos países (Francia y España), y muchos no pudieron asistir simplemente por falta de medios, no por ganas. No cabe duda: la gente quiere verse”.
Ahora la empresa lanza un plan de eventos en varias ciudades, reuniones de presentación a pequeños grupos. Se tratará de experiencias personalizadas de hasta 10-15 personas, que se repetirán 3-4 veces durante el día (un poco al estilo de un back-to-back), en el cual cada grupo vive su experiencia propia. De hecho, este formato tiene sus ventajas, small is beautiful! “Permiten una relación más cercana, la gente se abre mucho más a participar, hacer o contestar a preguntas, y creas una complicidad mayor”. Nacho agradece a su agencia Drago Eventos su valor con la propuesta y a los diferentes proveedores por hacerlo sencillo, seguro y divertido. ¡Oleee!