Una noche para la ópera y la eficacia en la publicidad

A nivel de producción de la gala, destacaba el escenario del Teatro Real que recogía una escenografía proyectada de 20 metros de ancho por 11 metros de altura ocupando toda la embocadura del teatro. En este escenario se podían contemplar un total de nueve pantallas interrelacionadas entre sí a modo de gran muro de proyección donde todos los contenidos del evento se representaban a través de estas pantallas: los logos de los patrocinadores y organizadores, nombres de premiados, los vídeos de cada caso e incluso los más de 70 trofeos estaban físicamente insertos dentro de este muro de proyección gigante.

La agencia Eventisimo, además del diseño de la imagen gráfica y la producción, se encargó de la regiduría y la producción audiovisual y técnica. Igualmente, gestionó el diseño espacial y la iluminación del cóctel servido en los salones del Teatro Real, tras la ceremonia de entrega.

Para dar cabida al cóctel de 1500 personas se utilizaron los seis salones de la segunda planta del teatro y el foyer. Una forma de acoger un servicio tan numeroso y además dinamizar el servicio a la vez que se daba visibilidad a los patrocinadores del evento. Cada sala estaba dedicada y tematizada con un color y cada una tenía un patrocinador. Por ejemplo, el salón Felipe V se tiño de naranja para convertirse en la Sala Categorías Especiales; el Salón Arrieta vistió de verde para albergar la Sala Premios Club de Jurados; o el Salón Carlos III, de azul claro, era el dedicado a la de Agencias Creativas del Año.

Life Gourmet de Ramón Freixa fue el catering encargado de ofrecer el cóctel sirviéndolo en formato buffet, para que así cada salón y patrocinador tuviera un buffet decorado con todas las variedades frías, que a su vez se reforzaron con el servicio pasado de camareros. Una hora y media de gastronomía que animaba a pasar por los distintos salones, conocer los patrocinadores sin perder bocado.