Una fiesta erótico-festiva para calentar una tarde de cine
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De esta forma los asistentes antes de sentarse en su butaca y disfrutar de la peli pudieron pasar un rato antes por la zona de terraza y gastro en la que probar originales daikikis (haciendo un giro con el nombre de la película) y bajo el ingrediente estrella del cartel de Kiki, el amor se hace: la sandía. Para amenizar la fiesta, los asistentes podían bailar sonidos tropicales y frescos de la mano del dj Lady Ego.
Y si lo que se quería era aprovechar para probar a echarse un amor de verano se desarrolló también una ‘Fiesta del semáforo´ donde cada asistente etiquetado con una pegatina roja, naranja o verde, dependiendo de si ya tenían pareja, abiertos al amor, o buscando pareja activamente. Una divertida forma de conocer gente nueva y compartir risas tanto antes como durante la proyección.
Los más atrevidos pudieron además seguir un taller-tuppersex sobre el mundo de las filias y fetiches para entender aún mejor las que se iban a mostrar con mucho humor durante la película.
Cibeles de Cine para animar el verano en la capital
El evento fue un ejemplo de las actividades que Sunset Cinema -la empresa de producción de eventos cinematográficos- junto con la agencia de comunicación Flamingo han organizado para animar la experiencia de cine en el Palacio de Cibeles.
Una combinación de programación de cine con oferta gastronómica de la mano de la terraza con aires vintage que monta Mahou y actividades complementarias a cada proyección: encuentros con miembros de la industria, noches temáticas musicales y gastronómicas o una exposición permanente de la ilustradora Paula Bonet – «813 Truffaut»- en homenaje a la obra y figura del director francés precursor de la Nouvelle Vague.