Un menú muy criminal para el Premio de Novela Negra de RBA
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El evento, presidido por el alcalde Xavier Trias y Ricardo Rodrigo, presidente de RBA, y presentado por la actriz Aitana Sánchez Gijón, reunió a más de 700 invitados del mundo de la cultura y la economía, que eran recibidos a su llegada por un gran logotipo de RBA proyectado en la fachada de este hotel de Husa.
Los jardines del {ms_253} fueron el escenario de la ágil gala de concesión del galardón -una apuesta por la brevedad que el público agradeció- a Michael Connolly por La Caja negra, en el que vuelve a dar vida al detective de homicidios Harry Bosch.
Camareros vestidos de gangsters
Un grupo de jazz puso la banda sonora a la fiesta, a la que las carpas y las piscinas daban un sabor aún muy veraniego. Pero uno de los grandes protagonistas de la noche fue el catering a cargo de {ms_125}, que se inspiró totalmente en la temática de la noche.
Camareros vestidos con tirantes y corbatas blancas, al modo gangster, desfilaron entre los 700 invitados sirviendo un menú diseñado como en cada edición para la ocasión. Es ya el sexto año que la empresa trabaja para RBA en estos premios, y siempre la ha tematizado ´criminalmente´ en sus aperitivos pasados y posterior buffet.
En esta ocasión, se sirvieron platos como ´Muestras de ADN´ (coca de Argentona con virutas de jamón de bellota); ´Asesinato en la granja´ (bombón de foie con frutos secos, almendra y pistacho, uno de los que más triunfó durante la fiesta); e incluso ´Crímenes nórdicos´ (mini brocheta de ahumados (atún, bacalao y salmón) y el ´Charco de sangre´ (gazpacho con picatostes).
De la ´traición gélida´ al ´bienvenidos al infierno´
¿Más nombres sugerentes? ´Ruidos en la oscuridad´, ´Bosque envenenado´, ´Grito ahogado´, ´Picadillo letal´… sin olvidar el ´Buffet de evidencias´ con nombres que además de jugar con lo criminal lo hacían con la ironía -´traición gélida´ para steaks tártaros y ceviches, ´bienvenidos al infierno´ para las brochetas, ´cruda realidad´ para los sashimis… todo, bien regado con las ´pócimas´ y los ´venenos´ que conformaron las barras de bebidas.
Un ejemplo de los que más nos han gustado últimamente de cómo multiplicar el atractivo de un catering sencillamente echando mano de mucha creatividad a la hora de bautizar los platos.