Un incentivo macondiano entre Bogotá y Cartagena de Indias

Salida desde Madrid con rumbo a Bogotá. Así empezó el incentivo, con una copa de bienvenida en el majestuoso Hotel Four Seasons Casa Medina, donde se alojó el grupo durante la visita a la capital colombiana… Al día siguiente aprovecharon para descubrir la ciudad con una visita guiada y recorrido por los museos Botero y Del Oro y visita al cerro Montserrate. Para cargar energías, un almuerzo en el restaurante San Isidro (preciosa casona con decoración del XIX). Y por la tarde vuelo con nuevo destino: Cartagena de Indias y traslado al hotel Sofitel Legend Santa Clara.

Tercer día: un buen desayuno, y ¡en marcha! Salida para visitar Cartagena de Indias a través de un recorrido por la zona norte bordeando los barrios de Bocagrande, Laguito y Castillo grande desde donde se aprecia la entrada a la ciudad. Visita guiada al convento de La Popa (con una bella panorámica de la ciudad y donde degustaron dulces entregados por palenqueras). Después visita al Castillo San Felipe, Gran fortaleza, donde el grupo fue recibido por personajes esclavos y mujeres vestidas de época y disfrutaron de la segunda degustación de ensalada de frutas tropicales, jugo de fruta corozo y “raspado” (helado) ofrecido por las palenqueras en el monumento a Blas de Lezo. Almuerzo en el restaurante El Santísimo, y un paseo a pie al Café del Mar, en el Baluarte de Santo Domingo, un mirador donde disfrutaron de la puesta de sol.

Al día siguiente tuvieron más movimiento: traslado al muelle Pegasos donde salieron a primera hora de la mañana en lanchas rápidas al archipiélago de Baru para disfrutar de un día de playas de arena blanca, aguas transparentes, caños de manglar y preciosa barrera de coral (y disfrutaron de actividades acuáticas). Por la noche, cena en ERRE by Ramón Freixa (experiencia culinaria a cargo del chef español).

La Cartagena de Indias más histórica. El quinto día supuso un día para descubrir la parte más histórica de la ciudad: paseo guiado a pie por el interior del Corralito de Piedra, donde disfrutaron del encanto de sus calles y los nombres representativos a cada hecho histórico acaecido en ellas (incluyendo la visita del Palacio de la Inquisición). El recorrido finalizó en La Paletteria donde degustaron una paletta artesanal (un conocido helado cuyo origen se remonta a la Ciudad Vieja de Cartagena). Por la tarde momento deportivo, participaron en una regata con monitores especializados y un director de regata. Por la noche, celebración de la Noche Macondiana, inspirada en la obra 100 años de soledad del universal Gabriel García Márquez, y cena en la Casa del Marqués de Valdehoyos (mansión colonial y casa de la cancillería).

Playa Bomba: naturaleza exuberante. Tocaba día libre y relajarse en la isla de Tierra Bomba (cuenta con más de 40 kilómetros de litoral costero), empapado de playas de arenas blancas, aguas cristalinas, palmeras y cocoteros, ya que por la noche tocaba la cena de gala en la iglesia de Santa Clara en el interior del hotel. Los invitados vistieron con trajes típicos, guayabera de la región caribeña para ellos, y vestido de cumbia de falda para ellas. Cóctel de bienvenida… y la cena dio paso entre cubertería de gala, chandeliers y flores. Vaya, ¡lo bueno se acaba!