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Ideas nuevas para eventos farma: ITB dmc organiza un hackathon en alta mar

Ideas nuevas para eventos farma: ITB dmc organiza un hackathon en alta mar

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 Pero... ¿qué es este nuevo formato guay de creatividad o búsqueda de soluciones? La fusión de "hacker" y "maratón" busca resolver un reto determinado en un tiempo limitado, por equipos compuestos por miembros de diferentes segmentos (corporativo, académico, emprendedor, etc.), con un jurado y normalmente en un entorno cerrado. A menudo en movimiento, como el hackathon tecnológico que se hizo en tren de Barcelona a París y Londres durante el Mobile World Congress. ITB dmc trajo este formato a la conferencia Fresh para solucionar la pregunta del millón: cómo mejorar los eventos farma cumpliendo a la vez el código deontológico.

En el marco de la conferencia Fresh, ITB dmc organizó lo que presentan como «el primer hackathon en el mar del mundo». El reto planteado: «Cómo implementar soluciones creativas, artísticas y dinámicas en las reuniones farma, respetando su código deontológico». Un tema que puede parecer la cuadratura del círculo en un marco deontológico conocido por su rigor, pero que sin duda responde a la inquietud de los profesionales de laboratorios que siempre buscan formas más efectivas de comunicar y de conectar. Los participantes eran asistentes de la conferencia: meeting designers, desarrolladores de apps para eventos, bloggers, ponentes y diversos especialistas en innovación aplicada al arte.

La ITB Hackathon se celebró a bordo de un catamarán que navegó por la costa barcelonesa durante dos horas. Constó de cuatro equipos de cinto participantes, más el jurado. En el trayecto se sirvieron bebidas ecológicas, brain food (el meeting design no perdona…), y dos violinistas interpretaron un repertorio pensado para potenciar el desarrollo cognitivo.

¿El método? Bastante libre. No se les dio una instrucción sobre cuánto tiempo debían usar en soltar ideas y cuánto en recogerlas, pero de algún modo, el lugar, el tamaño de los equipos, el tiempo que se daba y el tema a tratar condicionaron mucho la metodología. Todos dedicaron una primera parte al brainstorming seguida de una segunda parte en que se desechaban y concretaban ideas y una tercera en la que se consensuaba la aportación del equipo.

¿Resultados? Las ideas se podían agrupar en 4 areas: formato, tecnología, speakers y bienestar.

A nivel de formato, las ideas apuntaban a introducir gamificación, storytelling, favorecer entrevistas a keynotes, hacer dessert breaks, y cambiar bastante la gestión del tiempo en las presentaciones.

En tecnología, se sugiere sustituir los tradicionales posters de papel por videowalls usando herramientas infográficas, touch screens interactivos; alejarse del powerpoint, distribuir el contenido de las presentaciones en la app del evento para que las sesiones se puedan centrar en debates y puesta en común en lugar de simples lecturas.

En gestión de speakers, se pensó formar a los speakers para que ofreciesen sesiones dinámicas que se tradujeran en un mejor aprendizaje, aplicar formatos TED o Pecha Kucha, o incorporar la figura de un experto en meeting design.

Y finalmente el sagrado bienestar: se abre la guerra al azúcar en los coffees, se necesitan espacios con luz natural, salir de los espacios habituales para fomentar la discusión, incorporar movimiento, mobiliario ergonómico, hacer un uso neurocientífico de música y luz para impactar en la experiencia.

El resultado de ese brainstorming colectivo ha sido trasladado a Farmaindustria para su aprobación y posterior divulgación entre laboratorios y organizadores de reuniones médicas. Stay tuned…

 

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