Hendrick
Compartir noticia
Escuchar
Con el concepto «un lugar donde entras cuerdo y sales loco», Enajenatorium es un evento en el que se hace un recorrido por distintos experimentos con la mente, teniendo como hilo conductor la ginebra y los distintos elementos e ingredientes vinculados con ella.
Para el desarrollo del evento, que se celebró en Madrid del 29 al 31 de mayo y que en breve se realizará en Barcelona, se ha trabajo conjuntamente con profesionales del mundo de la ciencia. Las experiencias que los asistentes viven en Enajenatorium han sido diseñadas por el doctor en ingeniería biomédica, Gerardo Gálvez; el experto hipnotizador Ramón García del Pomar; el naturópata Fernando García Suárez y el doctor en psicología Salvador Soto.
En Madrid el restaurante {ms_2584} se tematizó para recrear el ambiente enrarecido y pelín tenebroso de los sanatorios psiquiátricos. En las cavas de su sótano los asistentes fueron sometidos a curiosos experimentos:
– Una cata de peculiares ingredientes en la que nada es lo que parece: una anémona de mar o una flor eléctrica despistaron al paladar para no poder reconocer el sabor de tomate en un cocktail en el que el característico color rojo de la hortaliza brillaba por su ausencia.
– Un hiponotizante juego de ordenador en el que el movimiento de la pupila de los invitados era la única herramienta para mezclar Hendrick´s y su característico pepino.
– Las pulsaciones se pusieron a prueba al conectarte a unos electrodos y entrar en una pequeña cueva en la que los estímulos visuales y sonoros (efectos de luces de colores en paredes y techo al ritmo de la música y de distintos efectos de sonido) te envolvían y aceleraban el pulso. Al salir, la prueba de que tus nervios de acero también fallan te la encontrabas en forma de electrocardiograma donde podías ver las subidas y bajadas de tu tensión.
– Una peculiar habitación del pánico en la que entrabas con los ojos tapados, en una silla de ruedas y con unos auriculares puestos, jugaba con tu sentido del oído y tus percepciones al meterte mediante el sonido en una inquietante historia donde no podías distinguir si lo vivido solo era contado por los auriculares o todo ocurría alrededor tuyo.
– Las ondas cerebrales de los asistentes también fueron examinadas poniendo una diadema con sensores en la cabeza y viendo como cada tipo de onda (alfa, beta, gamma o delta) eran capaces de poner en ebullición el líquido depositado en cuatro probetas.
Cada probeta representaba un ingrediente que se utiliza en la elaboración del coctel perfecto con Hendrick´s como el pepino, la rosa, enebro… Solo te pedían concentración para que tu mente eligiera el ingrediente con el que un bartender al lado prepararía el coctel que mejor casa con los gustos de tu cerebro.
– Para acabar la experiencia, un mentalista retaba a nuestra mente y nos demostraba el poder de la influencia con inquietantes juegos de ilusionismo. Un evento en el que quedó claro que nada es lo que parece y que con la idea de la experimentación y el juego sensorial, se quiso mostrar el concepto de ginebra inusual que caracteriza a Hendrick´s por su peculiar proceso de elaboración (elaborada con dos alambiques, con infusión de rosa, la primera marca en ponerle un pepino a un gin tonic…).
Un evento en el que quedó claro que nada es lo que parece y que con la idea de la experimentación y el juego sensorial, se quiso mostrar el concepto de ginebra inusual que caracteriza a Hendrick´s por su peculiar proceso de elaboración (elaborada con dos alambiques, con infusión de rosa, la primera marca en ponerle un pepino a un gin tonic…).