Food trucks para un evento con sabor a networking
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Los auténticos protagonistas de la velada fueron el millar de empleados venidos de diferentes países (EEUU, Irlanda, Holanda, países escandinavos, Francia, Italia, Alemania, España, Emiratos Árabes, Dubái, etc.) con delegación de la empresa, que emprendieron el viaje hacia al recinto sin saber con qué se iban a encontrar. La sorpresa fue total.
Reconversión del concepto y espacio. El emblemático edificio era un primer activo de la noche: TAP es la antigua plaza de toros de Tarragona, ahora transformado en un espacio para eventos. “Esto implicó una aclaración previa a los asistentes ya que el concepto y la actividad que tradicionalmente se asocia a una plaza de toros no son bien recibidos por extranjeros”, nos comentaba María Comas de PMI Events. Tuvieron también que quitar algunos carteles que tenían relación con las corridas de toros.
Una cena muy networking. No fue casualidad la distribución y el montaje con carácter discernido, alrededor de la plaza… La idea era crear un ambiente de networking, evitar la tradicional cena “sentados” e incentivar las relaciones y el movimiento. “Utilizamos un montaje de lo más variado: bancos estilo “Oktoberfest”, mesas altas para los que no querían sentarse y una barra central para motivar la interactividad entre los asistentes”, nos explica María.
Menús adaptados para diferentes países. La cena contó con una oferta gastronómica servida en 20 food trucks de diferentes estilos que rodeaban la arena de la TAP. Sushi, nachos con guacamole, hamburguesas, hot dogs, pasta italiana y todo tipo de postres fueron algunos de los platos de esta cena con toque informal. “Tanto en los food trucks como en las mesas depositamos información de los menús, que integraron platos veganos o alimentos sin gluten y lactosa, e informar a los asistentes para evitar problemas de alergias”, nos detallaba María.
Facilidad en el montaje. El espacio está adaptado en su interior con un gran equipamiento adaptado para esa ocasión: “una pista de baile de madera de 100m2, un escenario natural situado encima de los antiguos toriles, capacidad eléctrica para enchufar los food trucks, incluso adaptamos una terraza para los no fumadores (aunque la filosofía del evento era “no fumador”), un guardarropa con azafatas…
Para facilitar el acceso a la plaza, “la policía y los mozos de escuadra fueron de gran ayuda” cuenta María.
Fiesta post cena. A continuación de la cena, los dj’s, venidos desde Alemania para la ocasión, y que son de fama internacional, consiguieron que todo el mundo estuviera bailando y que todos los asistentes disfrutaran de la noche.
