Esgrima en el Círculo de Bellas Artes para una reunión de directivos
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Necesidades técnicas para competir en esgrima
Para la actividad “necesitamos algunas peculiaridades”, nos señalan desde Nuba. Entre ellas: cuatro pistas de esgrima (de 16 x 1,5m) con necesidad de instalación eléctrica, 120 sables de goma espuma, 30 caretas y chaquetas de esgrima para competición por equipos, 10 caretas a modo de premio para el equipo ganador, 120 sillas, biombos, etc.
Master class común con los 120 participantes
La primera parte del evento comenzó con una master class a los asistentes sobre las nociones básicas de los pasos principales de la esgrima: Pirri (experto en la materia), enseñó a los asistentes a hacer la “guardia”,” marchar” y “romper”. Para ello, se crearon 15 equipos con ocho personas en cada equipo. Y a cada grupo se le exigió trabajar lo que habían aprendido y ponerlo en práctica: un grito de guerra; un canal de comunicación; ¿qué vamos a decir si estamos ganando o perdiendo?; ¿cuál es la estrategia del grupo? «Todo esto tuvieron que ponerlo en práctica para animar al líder de su grupo en los asaltos finales», nos señalan desde la agencia.
Objetivo del evento con un mensaje: ‘somos imparables’
Con esta reunión, la empresa quiso facilitar información interna de la compañía sobre resultados y estrategia empresarial a sus directivos y gerentes. Además de motivar a sus empleados, remarcar el mensaje juntos como equipo «somos imparables», y recordar que estas reuniones son importantes (se trataba de la primera celebración conjunta en equipo después del periodo Covid).
Objetivos a conseguir con la actividad
Administrar la estrategia y planificación utilizada en la consecución de un reto; aprender a gestionar los autos para sacar el máximo rendimiento personal; definir objetivos reales y medibles; diseñar una estrategia rentable a través de lesgrima eficaz; gestión del cambio (ofensivo-defensivo); control de la planificación para conseguir objetivo, y la derrota es el momento perfecto para aprender…y la victoria también. En resumidas cuentas: asumir el éxito como parte del camino.
