Cena de gala de Accenture, un viaje con table mapping en pleno Guggenheim de Bilbao
Compartir noticia
Escuchar
Temática surrealista propuesta desde la propia compañía
Este año Accenture ha devorado agencias creativas y publicitarias, te lo contamos aquí. Y es que la consultora ha ido evidenciando poco a poco su reinvención de modelo de negocio apostando por la creatividad. Como no podía ser de otra forma, también esto se extiende a sus eventos y, en concreto a su cena de gala, estableciendo el surrealismo como temática general. Paloma García, directora de Capital Evento, nos revela que esta idea surgió del propio presidente a raíz de una reedición inspirada en el libro Las cenas de Gala de Salvador Dalí que han elaborado de manera limitada a nivel interno. De este modo, el surrealismo conduce a la elección de un museo de arte contemporáneo como espacio; y trasciende al menú, al dresscode (“con atuendos provocadores” según Paloma) o al photocall con doble trasera para simular estar “encerrado en un tarro como Alicia en El país de las maravillas cuando se hace pequeña”. El siguiente vídeo refleja hasta qué punto se llevó el surrealismo:
Primer table mapping en el museo Guggenheim de Bilbao
Hoy en día estamos ya habituados a ver espectáculos de mapping en las fachadas, y lo cierto es que el propio interior del museo sirvió de fondo para la proyección de múltiples imágenes HD…Pero por si esto fuese poco, Lumentium con Víctor Cid a la cabeza, trasladó también el vídeo mapping a las mesas, con experiencias gourmet visuales en las que el plato se funde con un ambiente virtual, lo que se conoce como table mapping. Víctor, nos explica que pese a que el museo no cuenta con rigging para colgar los proyectores, esta técnica se ejecutó con sus lámparas patentadas table mappers que ya integran dicho proyector. Sin ningún tipo de problema se instalaron en el Atrio donde tuvo lugar la cena, un espacio de 55 metros de altura con vistas al mar Cantábrico.
Primera vez que Josean Alija y Ramón Freixa crean un menú en común
Al chef con una estrella michelín Josean Alija, con un restaurante dentro del propio museo (NEURA Gugguenheim), se unió Ramón Freixa, con dos estrellas michelín. Juntos ofrecieron un menú centrado en el surrealismo, el hilo conductor ineludible en todo el evento. Como en un viaje, cada plato se desarrollaba en un mundo surrealista: cóctel y entrante en Bilbao, para volar seguidamente con el plato principal a Nueva York y terminar el postre en París. Así, las proyecciones en mesa de la ría y los edificios de Bilbao con los platos más típicos de la zona, dieron paso al parque de atracciones Luna Park de Nueva York con un hot dot totalmente reinventado. El broche final fue un macaron parisino rematado con nitrógeno líquido, que provocó una extensión de humo con olor a chocolate por las 21 mesas de los 210 asistentes.
Reto de montaje y producción
Dado que el museo solo cierra de cara al público los lunes, todo el montaje del table mapping tuvo que realizarse a contrarreloj. Víctor Cid nos confiesa que para Lumentium fue todo un reto: “es la primera vez también para nosotros, nunca antes habíamos montado esto para 21 mesas en solo 16 horas”. El montaje a nivel técnico es complejo, dado que son más de 150 metros de fibra por los que se conduce la señal en 3D. De igual modo, existe la dificultad de que para que la experiencia gourmet visual sea un éxito, los camareros deben actuar totalmente al compás. Por lo cual, también a contrarreloj, unas horas antes del evento se llevaron a cabo varios ensayos con los 35 camareros y 5 metres. Y para garantizar la absoluta simultaneidad, el control técnico les señalaba mediante dispositivos tipo walkis los instantes precisos de colocación de los platos.