Siete ideas para incentivos en Estocolmo
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Esculturas de hielo. Aprender a esculpir obras de arte efímeras sobre hielo puede ser (discúlpanos la broma fácil) un perfecto rompe-hielos para un grupo.
De la mano de un profesional, se aprenderá este arte creativo y tan nórdico.
Para terminar, ya convertidos en aprendices que saben apreciar las dificultades de esta labor, se les puede llevar al Icebar Stockholm (a -5°C todo el año, y donde todo, desde las paredes hasta las copas, están hechas de hielo) a tomar unas copas con música sueca de fondo, y admirar el trabajo que en este local han realizado los expertos en esculturas de hielo.
Conducción sobre hielo. {ms_757} propone incentivos que incluyen un plan muy, muy adrenalínico: conducir sobre hielo.
En las inmediaciones de la ciudad, lo organizan durante todo el año, pero lo recomiendan especialmente en verano, cuando el contraste lo hace aún más especial.
Los participantes montan en coches con instructores especializados; además, se les enseña a conducir con precisión por pista: no ganará el que vaya más rápido sino el que sepa calcular mejor el tiempo y la velocidad.
Cena de gala entre antiguos navíos. Estocolmo es una ciudad sofisticada pero de aires muy marineros, donde la relación con el mar ha sido siempre estrechísima. ¿Por qué no dar al cierre del incentivo un toque naval?
Un impresionante barco del siglo XVII presidirá la velada, a la que los invitados llegarán a bordo de otra embarcación histórica y disfrutarán de un menú de platos tradicionales basados en productos del mar.
Estocolmo en globo. La capital sueca es una de las pocas ciudades del mundo que permite que se la sobrevuele en globo.
No hay que perder la ocasión… Desde las alturas, podrás apreciar hasta qué punto el verde de la vegetación y el azul del archipiélago tiñen esta ciudad, siempre en comunión con la naturaleza.
Capital mundial de la novela negra. Incentivos tras las huellas del crimen… El superventas Stieg Larsson puso de moda la ciudad con su trilogía Millenium, aunque los auténticos aficionados al género ya hace años que lo han aprendido todo sobre la cultura sueca a través de Henning Mankell y Maj Sjöwall & Per Wahlöö.
La ciudad ha capitalizado este interés de las «nuevas reinas de la novela negra» y organiza el Millennium city walking tour, que recorre los lugares más emblemáticos de la saga.
Dancing Queens. ¿Quieres diversión asegurada y mucho buzz en Facebook y twitter? Apunta al grupo al tour ABBA.
La mítica formación musical edita una guía turística de Estocolmo en la que descubrirás los escenarios que ilustran las portadas de sus discos y los que inspiraron sus canciones.
Dormir en una prisión. Construida en el siglo XIX, Lanholme fue una de las primeras cárceles de Estocolmo hasta que en 1975 cerró sus puertas y reabrió años más tarde como Hotel Langholmen.
Otra opción original es escoger el Island Lodge, un hotel ecológico de lujo a 40 minutos en barco que ofrece mucha privacidad ya que sus tiendas de campaña están repartidas por una isla deshabitada, y el grupo