Reuniones con un nuevo enfoque

Dices que las asociaciones tendrán que orientarse más a un target más joven, ¿Qué impacto tendrá esto en sus reuniones?

Me temo que el impacto inmediato de esta medida, que es necesaria para frenar la atrofia en membresías, pasará por cambiar el modelo de aprendizaje y hacer pasar la sabiduría acumulada de generaciones anteriores a una nueva generación. El impacto probablemente beneficiará a plataformas tecnológicas que serán las herramientas para ese traspaso de conocimientos a los más jóvenes.

En el caso de las empresas, que tienen que tomar más en serio la investigación y el desarrollo, ¿los actuales formatos de reuniones son insuficientes para el intercambio adecuado de conocimiento y para la creación de ideas?

Por extraño que parezca, la tecnología se usa con muy poca frecuencia para sugerir lecturas o videos antes de las conferencias y poder enriquecer así el contenido de la reunión y el debate posterior. Debido a los desafíos actuales, al público le gusta debatir, intercambiar puntos de vista diferentes y contrastados, una de las claves de desarrollo del I+D. Así que los formatos de reuniones tienen que cambiar para posibilitar la formación antes del evento.

De forma parecida, las conferencias y las sesiones de debate dejan en el asistente muchas impresiones, pero no sirven para tomar decisiones consensuadas de forma unánime y que los participantes se puedan llevar a su casa y poner en práctica.

Relacionas muy directamente las reuniones con la investigación y el desarrollo, pero todavía hay muchos profesionales en nuestro sector que dudan de esta vinculación (piensan que esta es principalmente una industria de la hospitalidad). ¿Qué les dirías para convencerles?

No son solo los profesionales de la industria los que infravaloran el I+D, el conjunto de los países occidentales ha perdido el hilo al respecto. Con demasiada frecuencia, la investigación y el desarrollo se reducen simplemente a ´creatividad´ y además en su dimensión más infantil y relacionada con el juego. Los profesionales de reuniones y eventos se deben centrar cuanto antes en el aspecto más serio de búsqueda de conocimiento y dejar el lado logístico y de hospitalidad con la intención de persuadir a los delegados a aceptar la difusión de conocimiento arcaico.

Las reuniones son clave para la formación continua, sin embargo surgen opciones como los MOOCs (massive open online courses). ¿Los meetings deberían complementar a estas herramientas online o ser una alternativa que ofrezca un aprendizaje más profundo y extenso?

Solo en una reunión se puede mirar a los ojos a los asistentes y comprobar si el aprendizaje se está produciendo. Solo en una reunión uno puede sentir implícitamente pero claramente, las reacciones de la audiencia, recibir feedback e la formación ofrecida y ajustar sobre la marcha. En los cursos de formación online, cuya tasa de deserción es bastante alta, no se pueden tener estas apreciaciones y feedback en tiempo real. Deberían ser los MOOCs el complemento ideal para las reuniones y conferencias, y no a la inversa.

Las reuniones apenas ha cambiado en los últimos 50 años (mismos montajes, formatos unidireccionales, etc.) ¿Estamos entrando en una revolución en el mundo de los meetings, llegará un cambio en el que se celebrarán reuniones como nunca antes habíamos visto?

Las revoluciones son más retórica que una característica propiamente dicha de la realidad. Reuniones con un acercamiento más orientado a la investigación y disciplinado no se alcanzará de la noche a la mañana. Hasta que los profesionales del sector no identifiquen los problemas correctamente, no se empezarán a ver cambios sustanciales.