Madrid prepara un “escaparate único” de los eventos de la ciudad

¿Cómo dirías que el Ayuntamiento ve los eventos profesionales?

La palabra que lo define mejor es “reto”: es un reto conseguir que todo funcione perfectamente, que organizador y asistentes tengan todas las comodidades, y que el evento funcione perfectamente y cumpla sus objetivos… Los eventos son una enorme oportunidad: la gente no tiene mucho tiempo para desplazarse y si tienen buena información sobre el destino, pueden extender su estancia o volver. Tenemos que cuidar el post-congreso.

¿Los eventos son valorados por el Ayuntamiento? El sector MICE no siempre se ve valorado y querido por los grandes ayuntamientos…

Hay dos ayuntamientos que, empezando con su implicación en Fira e Ifema (el Ayuntamiento de Madrid tiene un 30% de Ifema), están naturalmente muy implicados en el sector de eventos y el atractivo de la ciudad. Además el Ayuntamiento de Madrid pone a disposición muy a menudo sus instalaciones, sea la Galería de Cristal o los Jardines de Cecilio Rodríguez por ejemplo, para hacer más atractivo Madrid para eventos. A veces incluso conseguimos que la Alcaldesa se implique, por ejemplo recibiendo al board de la entidad organizadora. Me implico también en muchas recepciones. Así que no cabe duda: el Ayuntamiento ha hecho muy claro su interés por eventos y congresos. Además la Alcaldesa ha dado como eslogan a Madrid “la ciudad del abrazo”, y quiere que seamos la ciudad que recibe gente.

¿A nivel de impacto económico?

David Pérez Noack, Madrid Convention Bureau: Hacemos un cálculo del impacto y llegamos a unos 900 millones de euros de impacto económico en la ciudad, pero sabemos que hay muchos eventos, incentivos, que no aparecen en estadísticas así que la cifra es bastante mayor.

Como novedad, muchas empresas chinas han elegido Madrid para sus incentivos y eventos. Además Madrid ha recuperado un rango como sede de muchos eventos musicales, desde MadCool en Caja Mágica hasta los premios de Bollywood. Hablamos de un impacto económico importante pero también una repercusión en medios y redes sociales en Asia considerable.

¿Hay tensión entre ciudadanía y el turismo que incluye congresos o incentivos?

Lo que ha provocado una reacción en Barcelona es especialmente el turismo de cruceros y aquí no tenemos este problema. No hay restricciones, no hay moratorio hotelero, no hay protesta ciudadana. Lo único que preocupa son los apartamentos turísticos en algún barrio. Pero esto no afecta al mercado de congresos. No estamos restringiendo sino activamente trabajando para captar más.

¿Hay un proyecto de ventanilla única? ¿Cómo aclarar y simplificar el trabajo del productor?

Más que ventanilla única, tenemos previsto un escaparate único. Vamos a presentar una aplicación sencilla en la cual quien quiere organizar un evento podrá ver si este día, hay una carrera, un rodaje, una avería, etc. Facilitamos información en tiempo real en un mapa, información de todo lo que pasa en la ciudad. Esta información preventiva permitirá ver si un espacio ya está ocupado.

Luego estamos trabajando para definir cuándo un evento es de interés para la ciudad. Si es un evento de interés puramente privado, ocupar la calle tiene unas tasas de ocupación y un proceso descentralizado a cada junta de distrito. Si tiene un interés público, desde Coordinación del Ayuntamiento, unificaremos criterios y tomaremos decisión. Hemos visto que no siempre teníamos los mismos criterios para decidir si un evento es de interés y ahora queremos asegurar coherencia.

Cuando un evento se hace en un distrito, el permiso se seguirá procesando desde la Junta de Distrito, pero vamos a asegurar que los criterios y procesos sean coherentes de un distrito a otro. Luego, si el evento implica acto en la vía pública, una persona vendrá de la Policía y coordinará Policía Municipal, SAMUR, Medio Ambiente… Así que no tenemos una vía única de recepción de peticiones pero sí un cauce único de tramitación.

(Madrid CVB). Y nosotros desde el Convention Bureau, vamos a darle transparencia e información al operador, para asegurar que conozca estos pasos y trámites. Muchas veces hay desconocimiento del procedimiento de permisos. Los organizadores pocas veces nos contactan; estamos encantados de ayudarles cuando lo necesitan.

¿Los criterios y procedimientos no dependen de la discreción de cada distrito?

Puede ser, y un año después de llegar vemos todavía disparidad de criterios entre los responsables de distritos. Pero una forma de solucionar esto es que dentro de la Coordinación General, está la subdirección de colaboración público-privada que, cuando un acto afecta a varios distritos (por ejemplo la campaña de Sony que quería instalar elementos de la Guerra de las Galaxias en varios distritos o cuando Bollywood instaló elefantitos por toda la ciudad), gestiona la petición para evitar tener que dirigirse a varios distritos.

Antes esta función estaba en la Dirección de Cultura, que tiene objetivos diferentes. Ahora está en Coordinación General. Es una mejora muy importante para asegurar que se tenga en cuenta las especificidades de los eventos profesionales.

Cosas excepcionales se hacen cada mes, en Madrid, desde la trashumancia de las ovejas hasta un concierto en la Puerta de Alcalá o una paella para miles de chinos al lado de la Casa de Campo. Tiene que haber una tensión sana entre el sector y el ayuntamiento para ver lo que es posible ahora.

¿Están muy claros los criterios y procesos?

Quizás es verdad que la información está diseminada por varias páginas y falta una web clara donde tener toda la información sobre procesos para tener permisos, por esto el compromiso del Madrid Convention Bureau de juntar toda esta información en su página web y así facilitar las cosas.

Faltan grandes espacios en Madrid. ¿Qué hace el Ayuntamiento?

Lo que tiene que ver con el Ayuntamiento, está clarísimo que facilitamos todo lo posible, desde el Ayuntamiento hasta el Matadero o Conde Duque, como ejemplos. Lo que tiene que ver con Patrimonio Nacional es mucho más complicado, puesto que tienen otra sensibilidad, otras prioridades aunque hay excepciones como el Prado que se ha abierto a eventos de forma muy clara. Hay muchos espacios que no son propiedad del ayuntamiento y que no podemos prometer nosotros.