¿Los mapas mentales salvarán a los asistentes de eventos?
Compartir noticia
Escuchar
¿Cómo se hace? Es muy sencillo: pones el concepto central de la charla en medio de la página, una página que idealmente pones en horizontal y de este centro se conectan los conceptos por ramas. Un concepto que se detalla en dos subconceptos da lugar a otra rama, y no se apuntan frases sino conceptos muy resumidos en una o dos palabras. Aquí puedes conocer más sobre este ejercicio.
¿Las ventajas de esta forma de tomar notas?
Más que frases, pensar en conceptos. Se trata de apuntar los grandes conceptos. Solo para las ideas más complejas se apunta todo el texto. Y el hecho de limitarse a conceptos fuerza a hacer un ejercicio de análisis. No hay que pensar mucho para apuntar frases enteras que otro ha dicho, pensar en qué es el concepto importante para ti te obliga a un ejercicio de mini-reflexión.
Tener tiempo para escuchar. Es consecuencia del primer punto: cuando quieres escribir todo lo que cuenta alguien ya no tienes tiempo de escucharle. Hacer algo visual como un mapa mental te permite optimizar el tiempo: no tienes que apuntar frases enteras y por tanto puedes escucharle mejor.
Conectar los puntos. Una charla no es una relación lineal, sino una colección de conceptos, a menudo relacionados, que conforman un conjunto. Los mapas mentales te hacen agrupar conceptos según su sentido para ti. De hecho es interesante notar que los mapas mentales de dos personas serán diferentes… porque se trata de haber hecho ya un ejercicio de análisis y de conexión de conceptos. Y por tanto entender la idea global y sus componentes y subcomponentes.
Utiliza la memoria visual. Tomar notas no utiliza la dimensión gráfica de tu cerebro; el mapa mental sí. Ya se sabe que apuntar a mano hace trabajar a nuestro cerebro mucho más que si apuntamos algo con el ordenador… pero también si podemos dibujar o colocar en el espacio, gráficamente, los conceptos, los recordaremos mucho más.
Es infinito. Tomar notas es lineal, así que si tienes que añadir algo relacionado con un concepto que has apuntado hace 10 minutos, no puedes. El mapa mental puede siempre acoger otra idea relacionada con un concepto que ya has apuntado. De hecho se puede enriquecer después de la charla, incorporando aprendizajes de otra charla…
Así que la próxima vez que organices un evento, no dudes en comentar esta herramienta a tus asistentes, podría convertir la conferencia en un gran aprendizaje, útil, para ellos. Y si asistes a un evento, ¡pon esto en práctica!