Lisboa vive su momento más dulce en eventos
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Lisboa es un destino perfecto en primavera para un viaje de empresa, el clima se vuelve delicioso y sus empinadas calles se llenan de luz y de flores.
Para disfrutarla, Nuba propone un viaje de tres días. Llegada a Lisboa, al hotel S. Pedro de Alcántara con parada para tomar una copa de vino blanco disfrutando de las vistas de la Plaça do Cómercio y almuerzo en el Aurea. Por la tarde, descansados, el grupo se dirige al barrio de la Estrella, donde le espera un tranvía en exclusiva para subir al Barrio Alto, el más bohemio y chic de Lisboa, donde los invitados pueden disfrutar del típico té y cenar el Restaurante Largo.
A la mañana siguiente en coches de caballos por Sintra hasta la Quinta do Reailera, y el Cabo de la Roca, el punto más occidental de Europa, y a la playa de guincho para volar cometas. Comida en Furnas do Guincho y después un paseo en velero desde Cascais hasta Lisboa, para rematar el viaje con la cena de gala en el Eleven, el primer restaurante de Lisboa premiado con una estrella Michelin.
Antes de despedirse de Lisboa, un recorrido en Tuk Tuk, una forma divertida y tranquila de callejear por la ciudad más recóndita como el Barrio del Alfama, Castillo de san Jorge y parada en el Rossio para tomar una Ginginha y degustación de los Pasteis de Belém, el delicioso pastel de nata que se sirve caliente con azúcar y canela.
Side cars, Smarts, tranvías y vehículos ecológicos… El trayecto también es diversión
Citur Destination Management propone un incentivo de cuatro días que empieza con un divertido transfer con carreras en side cars hasta el Teatro Tívoli para una copa de bienvenida, seguida de un traslado al hotel. Tras relajarse, parten en tranvía hasta el Castillo de Sao Jorge, en pleno corazón de Alfama, para tomar un cóctel y cena típica con sardinas y el vino blanco, ambos tan típicos de la ciudad.
Al día siguiente, descubren la costa de Lisboa a bordo de Smarts, visitan Sintra con cata de vinos, y ponen el broche de oro al día con una salida al anochecer en el elevador Gloria hasta San Pedro Belvedere, para disfrutar de un paseo por el célebre Bairro Alto con un cóctel en una de sus tiendas de moda y cena en Olivier Café.
El tercer día, descubren Belém con «vehículos ecológicos», toman un cóctel y almuerzan disfrutando del Tajo con una regata vespertina. Por la noche, toca cóctel en Bica do Sapato y cena en Restaurante Virgula, ubicado en un antiguo almacén de sal. Después de la cena, unas copas en Amo-te Tejo, antes de descansar y coger los vuelos de regreso al día siguiente.