¿La IA te ayudará? Hmmm… lo más probable es que te haga tonto
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Sabrás que me encanta leer y escuchar cosas que no son ‘de eventos’ pero que tienen una aplicación en nuestro sector. Hoy te traigo un episodio de un podcast increible, de Tim Harford, Cautionary Tales, podcast donde el autor analiza dramas y problemas y saca aprendizajes de grandísima utilidad para entender mejor el ser humano. En este episodio Flying Too High: AI and AirFrance Flight 447 (que sin duda escucharás…), nos cuenta la historia del vuelo Air France Río-París que se estrelló en el Atlántico en 2009.
Resumiendo, el problema (que explica de forma mucho más completa) es que el piloto automático se desactivó por un problema de hielo, y los tres pilotos tuvieron que retomar el control del avión en un contexto de tormenta, y en este proceso analizaron mal la situación y recurrieron a viejos reflejos (especialmente el hecho de levantar el avión, reflejo clásico cuando lo que temes es estrellarte) hasta que el avión perdiera su capacidad de aguante en el aire y se desplomara a pesar de apuntar más y más alto.
Esto no es una publicación de aeronáutica, con lo cual te dejo escuchar el podcast para entender las múltiples decisiones erróneas que se tomaron, y solo te entrego la conclusión: cuando tenemos un sistema que puede tomar decisiones por nosotros, como un piloto automático (o como la IA), la tendencia humana es delegar totalmente y perder la capacidad de retomar el control. La teoría que escuchamos una y otra vez, es que la IA nos apoyará pero nuestra magia humana sabrá filtrar, decidir, añadir ideas, etc. La realidad es otra: el ser humano ahorra energía y está muy contento de descansar y delegarlo todo si puede.
Tim Harford da otros ejemplos:
- En un test, pusieron a dos grupos de reclutadores a hacer entrevistas con apoyo de la IA. Un grupo con buena IA (y presentada como tal) y otro con IA algo deficiente. Resultado: los que sabían que tenían una IA imperfecta tuvieron mejores resultados que los equipados de buena IA. Si sabes que tienes apoyo de la una buena IA, dejas de hacer esfuerzos, y este “complemento de inteligencia humana” ya no se produce. Mañana tendrás una buena IA… y tu tendencia será apagar tu espíritu creativo o crítico.
- En otro experimento, un grupo comparó sesiones de brainstorming hechas con y sin el apoyo de ChatGPT. Los miembros del equipo equipados con chatGPT “se apagaron”, dejaron de buscar ideas juntos y pidieron las ideas al ordenador. Los resultados fueron muy predecibles, mucho peores que los hechos por el equipo que no contaba con IA. Los participantes lo dejaron todo a la IA y fallaron en esta tarea teórica de completar, arbitrar etc. La magia de la complementariedad máquina-humano no funcionó.
Y lo vemos en nuestras vidas: la tecnología no te apoya un poco para recordar números de teléfono, leer mapas o mañana, traducir textos: toma esta habilidad y simplemente, te la quita (porque se la dejas). Así que, en nuestro sector, siguiendo el ejemplo que da Tim, pensemos que mañana las sesiones de creatividad podrían mañana ser recopilatorios de ideas entregadas por una IA que solo regurgita cosas ya creadas.
¿Piensas que no te pasará? No olvides que eres humano. Así que, utiliza la IA pero asegúrate de mantener momentos o procesos sin IA donde te aseguras que tu magia mantenga su poder. Si no, la IA te irá quitando habilidades, es una ley potentísima. Y más allá de los eventos, piensa en qué habilidades aceptas perder antes de dar demasiado trabajo a la IA. Si no, se lo tragará todo…