FOOH, todo lo que querías saber sobre el fake más bestial pero no te atrevías a preguntar

¿Qué es exactamente un FOOH?

Un Fake Out Of Home es una publicidad exterior simulada. Lo que hay es un espacio vacío sobre con el que con diversas técnicas de posproducción como FGI, VFX creas una historia. Pero todo es falso, es pura posproducción, y eso mola, porque puedes hacer cosas muy flipantes, que la gente diga ¡guau!… realmente puedes hacer cualquier cosa. Como subir una botella de Tanqueray a un edificio de Madrid, poner una grúa… Lo que haces es ir a la figuración, grabamos el plano vacío, los figurantes que señalan… pero realmente no está pasando nada. Todo lo que ves luego es una ‘película’ que has creado con el ordenador, como efectos especiales digitales.

¿Así de fácil?

No, tiene su gracia. Realmente grabamos con una cámara 8K. O sea, que al final lo que hacemos luego es estropear la imagen como si pareciese que está grabado con un móvil. Grabamos el espacio tal como está por lo que hace falta una coordinación bastante fuerte entre el equipo de grabación que está ahí con nuestro equipo de posproducción desde la productora, para que nos digan exactamente en qué segundo la cámara tiene que moverse hacia dónde, cuándo tiene que reaccionar la gente, porque realmente lo estamos grabando ‘en la nada’.

Se trata en realidad de una pieza muy pensada para redes sociales, una especie de fake news pero en publicidad. De repente tú estas tan tranquillo en Instagram, en Tik Tok, viendo videos y de repente dices ¿pero ¿qué está pasando en el edificio de Tío Pepe con Tanqueray? Es una publicidad fake que nos permite hacer cosas impensables.

O sea que tiene mucho más de ‘fake’ que de ‘out’

Exacto. Pero esa es la gracia porque las propuestas de la mentira son infinitas, todo es posible, cada fake será más espectacular que los anteriores.

h

Y bajando a terreno ¿qué aplicación puede tener en acciones presenciales, eventos…?

Puedes hacer locuras, como por ejemplo (algo que veremos pronto) que puedas ir por la calle con el móvil (o a un evento) y veas un FOOH en ese mismo momento relativo a algún tipo de publicidad. En realidad, son tecnologías tan nuevas, tan rápidas que también nosotros vamos sobre la marcha, experimentando. En todo caso, el mayor partido que se le puede sacar es crear una campaña paralela en la que el FOOH se una pieza más de impacto. Y creemos que ahora con las gafas Apple Visión Pro las cosas irán por ahí.

Un ejemplo de lo que menciona David fue el FOOH de Beefeater Black, protagonizada por Carliyo, que simuló con bastante eficacia una invasión de cuervos en varias ciudades de España combinando FOOH, redes sociales, mensajes y marketing de influencers. El momento, que se hizo viral, comenzó cuando Carliyo gastó una broma a su novia haciéndole creer que había encontrado un cuervo por la calle y se lo había llevado a casa a través de fotos y videos. La historia se iba haciendo cada vez más rocambolesca cuando Carliyo le mostró el creciente número de cuervos que se congregaban en su casa, y compartía con ella otros vídeos de otros puntos del país que, supuestamente, la gente le estaba haciendo llegar. La viralidad increíble de esta acción digital mezclando imágenes reales con otras generadas por ordenador supuso para la marca una promoción única. La idea fue no limitarse a un FOOH sino crear un RFOHH (R de Real) para crear una historia real.

El momento, que se hizo viral, comenzó cuando Carliyo gastó una broma a su novia haciéndole creer que había encontrado un cuervo por la calle y se lo había llevado a casa a través de fotos y videos. La historia se iba haciendo cada vez más rocambolesca cuando Carliyo le mostró el creciente número de cuervos que se congregaban en su casa, y compartía con ella otros vídeos de otros puntos del país que, supuestamente, la gente le estaba haciendo llegar. La viralidad increíble de esta acción digital mezclando imágenes reales con otras generadas por ordenador supuso para la marca una promoción única. La idea fue no limitarse a un FOOH sino crear un RFOHH (R de Real) para crear una historia real.

¿Es carísimo?

Depende. Nosotros, por ejemplo, para la maratón de Zurich de Madrid, que al final es un evento muy local, aunque sea muy grande, hicimos un FOOH en el que desplegamos como una lona gigante en el edificio del Ayuntamiento. Y incluso para alguna farmacéutica también con un medicamento. Depende mucho de la complejidad de lo que queramos recrear. Y básicamente de eso, de la complejidad de lo que queramos recrear, porque el rodaje son dos personas; una con una cámara y una persona de producción que la asiste, lo que es bastante económico. Todo depende de la jornada luego de posproducción, pero no es un producto especialmente caro.

¿Crees que han superado su efecto wow?

Han sido una tendencia muy fuerte durante muchos meses, y lo siguen siendo, pero creo que en breve va a bajar la fiebre porque la gracia era que la gente un poco se lo creyera. Ahora el punto aquí es la creatividad, que se pueda jugar con eso, que la gente se divierta.