¿Elegir entre experiencias vs información? (PCMA2)
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El valor de las experiencias significativas
Más allá del negocio y la relación, una reunión suele tener un objetivo nuclear: información y conocimiento. Si algo ha cambiado en los últimos años es cómo accedemos a este conocimiento; aunque sigue habiendo mucha gente que se conforma, e incluso prefiere, sentarse en un sitio y que le cuenten, la tendencia es que también se puede aprender, e incluso aprender y retener más, con experiencias que apelan a la diversión, la participación, la implicación, o la emoción. Como se vio en San Francisco a la gente le gusta ‘moverse’, que pasen cosas. “Me encanta que se puedan hacer tantas cosas entre sesiones. Realmente convierte el evento casi en una fiesta”, comenta un asistente.
Hubo más observaciones. Por ejemplo que la gente atrae la gente: los participantes se unían espontáneamente a las sesiones más concurridas, y prefirieron las experiencias face to face, antes que las digitales que se encontraban en salas adyacentes. También aquellos patrocinadores que organizaron actividades interactivas, o simplemente montaron una zona de café, atrajeron a más asistentes (aunque indica el informe que la localización fue otro factor a tener en cuenta). Y los sentidos: los corners con masajes, o de aromatización del agua, etc. crearon un ambiente de diversión, y exploración, especialmente aquellas asociadas a la personalidad de diferentes ciudades presentes en la conferencia.
¿Cómo puedo aunar experiencias interactivas sin perder el objetivo de información y conocimiento?
- Prueba nuevos formatos. Un escape room fue el último gran premio de los Bea World: Google andaba preocupado de que su nueva herramienta Home Training, relativamente nueva para el consumidor, supusiera un aluvión de preguntas, y necesitaba que el personal que atiende en primera línea a los usuarios la conociera mejor que nadie. Así que los encerraron en su lugar de trabajo sin previo aviso, les quitaron los móviles y dispositivos antes de entrar, y sellaron las salidas. La única forma de escapar de esta encerrona fue que encontraran la salida en un reto que solo podían resolver… navegando con la ayuda de Google Home. Otro ejemplo son los hackathons, que arrasan en multitud de eventos que no imaginarias, incluidos congresos médicos, y en general, todas aquellas fórmulas de intercambio colaborativo del conocimiento, como brainstormings, etc.
- Existen softwares, como por ejemplo Sparkup, que guían al grupo de forma interactiva que obliga a participar de diversas maneras.
- No hay nada más serio que la diversión. La gamificación ofrece múltiples formas de aprender y acceder a la información, por ejemplo con fórmulas como la improvisación, la creación de historias, etc.
- Actividades de networking: un gran porcentaje de la información con la que el asistente se va a casa viene de esa charla informal con gente que no conocías de nada. Una buena que vimos recientemente: crearon una especie de álbum de cromos (como los de los futbolistas que tenías de niño) y debías completarlo con las personas que ibas conociendo. Fue divertido y sumamente eficaz.
- Piensa dos veces en el montaje que vas a hacer: es interesante que fomentes el contacto visual que aporta emoción y deseo de conexión, por ejemplo disponiendo los asientos en círculo, o con asientos ligeros y desplazables que permitan dinámicas como hacer grupos, etc.
- Para los más atrevidos, el Freudian Walk puede ser una gran opción. En este caso lo que se pretende es iniciar una discusión mientras se pasea en grupo, contemplando el entorno y en constante movimiento. Todos sabemos que el ejercicio estimula nuestro cerebro, y un entorno natural como el campo o la montaña pueden ser el complemento perfecto que haga que todos se abran y contribuyan a la reunión casi sin darse cuenta.