8 pequeños trucos que harán fluir el networking en tu evento

Te traemos un recopilatorio de pequeñas y sencillas ideas, que crearán un ambiente más propicio a la participación. Objetivo: que los asistentes interactúan más y conozcan más tanto de ponentes como de otros asistentes.

Pregunta a los asistentes qué les interesa de la reunión ¿qué temas quieren que se trate? ¿a quién les interesaría conocer? ¿qué es lo que realmente quieren aprender? ¿qué es lo que busca? Lo puedes hacer a través de cuestionarios previos al evento o antes de comenzar la reunión formar un singular ‘tablón de anuncios´ en el que cada asistente ponga un Post-it con su deseo particular que quiere que se materialice durante el evento. Seguro que coincidirá con más gente que ponga lo mismo y que además sea visto por alguien que le pueda ayudar a conseguirlo.

Publica la lista de asistentes antes del evento y anima a que estos incluyan una breve presentación de cada uno. Tanto en la web o en la app del evento los invitados pueden consultar los perfiles de la gente con la que le interesaría tomar contacto.

Utiliza alguna dinámica para que los asistentes puedan ser reconocidos fácilmente, ya sea un cartelito en la solapa con su nombre u organizando algún juego para romper el hielo en el que se tengan que presentar ante los demás de una forma relajada e informa; también puede servir plantearles un reto o juego como excusa para que hablen y se conozcan, por ejemplo descubrir un secreto inconfesable que les haga preguntarse indiscriminadamente los unos a los otros.

El tamaño importa. Seguro que no es nuevo, pero un recordatorio nunca viene mal: siempre que puedas huye de las enormes salas plenarias. Intenta organizar sesiones de trabajo con grupos pequeños, realizar discusiones temáticas o talleres temáticos en los que los asistentes vayan rotando, en los que se puedan mezclar distintos perfiles de asistentes. Los grupos pequeños facilitan más la interacción de todos los participantes, se sienten más cómodos a la hora de hablar frente al momento de pedir la palabra ante un gran auditorio lleno de desconocidos.

Si por exigencias del guion o simplemente logísticas, no tienes más remedio que juntarlos en una gran sala facilita estos encuentros en ‘petit comité´ durante el coffee break, organiza pausas largas o encuentros temáticos en lo que aprovechando el aire más distendido de la pausa café se puedan hacer pequeños grupos y discutir sobre algún tema en concreto.

Cualquier sitio es bueno para sentarse con alguien y conocerse, pero si lo haces saber seguro que les animas a dar el primer paso. Desde habilitar y señalizar pequeños offices donde sentarse con intimidad ante un ordenador, impresora y un escritorio o simplemente llenando las esquinas de la sala, hall o pasillo con taburetes, sillones donde pararse a charlar cómodamente.

Pon un moderador en tu reunión, y no solo para que de paso a los distintos ponentes, lanzar preguntas, o dirigir las mesas de debate, sino también para hacer que distintos grupos interactúen entre sí, conducir distintas dinámicas de trabajo o ayude a romper el hielo entre asistentes, haciendo presentaciones, sacando temas de conversación para salvar esos momentos de incómodo silencio.

Y no olvides el after event para que continúe el networking. Igual que no puede faltar una actividad más lúdica o un cocktail para afianzar los contactos con la gente que hemos conocido durante las sesiones de trabajo ¿por qué no replicar ese espacio de networking relajado a través de una plataforma online donde los asistentes puedan seguir en contacto tras el evento?