4 ideas inspiradoras para incentivos en Dubrovnik

Un experiencia 100% natural en el valle de las mandarinas. Así se conoce al valle de Neretva en el que crecen alrededor de 1.300.000 árboles de mandarinas que dan anualmente unas 60.000 toneladas. Recogerlas es una de las actividades de equipo para vivir una experiencia (y llenar las reservas de vitamina C para afrontar el invierno…). Los recolectores os darán todo el material y explicarán cómo recolectar las mandarinas, su historia y la forma de cultivarlas. Para hacer más llevadera la jornada, música alegre mientras llenáis las cestas del tesoro naranja y, terminar el día con una comida casera. También se puede hacer un safari fotográfico en las tradicionales embarcaciones o visitar Vid, donde está el Museo Arqueológico de Narona, único en Croacia construido en el mismo lugar en el yacimiento.

Recorrido por la Perla del Adriático. Una propuesta que hizo el Grupo Nuba para el incentivo de una empresa de automoción. Organizaron un viaje en el que, nada más llegar, descubrieron Dubrovnik a vista de pájaro. La mejor panorámica se encuentra en el Monte Srdj, al que ascendieron en teleférico y, en la cima, tomaron un aperitivo. Tras la visita fueron al hotel Excelsior 5*, un edificio protegido situado frente al mar y a 7 minutos a pie del centro histórico, con playa privada, restaurantes con vistas al mar y un spa de 850m². Al día siguiente viajaron a Konavle, un valle rodeado de olivos y viñedos para vivir una experiencia que incluyó una cata de vinos y aperitivo en un centenario molino al atardecer. Y la cena en una finca rural donde un antiguo molino convertido en taberna culminó la experiencia gastronómica con especialidades como el pan de oliva o el cordero a la “peka” (una cubierta de metal donde se cocina “bajo la campana”), el plato más popular de la región. El viaje terminó con un recorrido en coches vintage (Renault 4) por Dalmacia,con parada en Ston, donde les esperaba un banco de ostras a bordo de un barco y almuerzo en unas bodegas en la aldea de Oskorušno.

La noche de los piratas. La fortaleza de San Lorenzo, situada sobre un acantilado de 37 metros de altura, es un lugar emblemático de la ciudad. Dubrovnik Travel llevó hasta la parte más famosa de las murallas a un grupo de 260 personas de una multinacional. Para este incentivo se organizó una cena temática centrada en los piratas, con la idea de revivir el espíritu aventurero de los tiempos en que los bucaneros surcaban la costa Dálmata. Para la ambientación y recreación temática, los invitados llegaron disfrazados al puerto del centro histórico en dos galeones históricos y, durante el recorrido a pie por la fortaleza, los acompañaron actores caracterizados como piratas, que hicieron demostración de sus artes.

Juego de Tronos, un must para incentivos en Dubrovnik. En la costa Dálmata está de moda seguir la ruta del rodaje de Juego de Tronos. Sobre todo en Dubrovnik, que en la serie se convierte en Desembarco del Rey. Y ese fue el tema central de un incentivo en el que los clientes eran fanáticos de la serie, por lo que decidieron hacer una noche temática. El lugar elegido fue la terraza de otra de las fortalezas medievales, la fortaleza Revelin, con montaje de largas mesas y sillas de madera. A su llegada, los invitados fueron recibidos por camareros vestidos con capas negras, que servían las bebidas, mientras la música de fondo recreaba la banda sonora de la serie. El menú también fue servido al estilo medieval. En el photocall no podían faltar la réplica del trono y todos los accesorios para que los invitados se hicieran la foto de recuerdo del evento. Ya sabes, Instagram…