4 ejemplos de cómo las marcas consiguen atraer público en una feria
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Los visitantes pueden acercarse a tu stand para ponerse a escalar
Sí, es posible y no necesariamente en una feria dedicada al deporte. La feria de diseño Bread & Butter berlinesa contó este año con un espacio de The North Face que no dudó en montar un rocódromo en su stand. Con el concepto de invitar al visitante a conquistar la montaña urbana, la marca de ropa deportiva quiso celebrar el espíritu de la inauguración de su primera tienda en 1966, cuando una tropa de escaladores punkis, fashionistas, activistas, miembros de la alta sociedad y beatniks abarrotaban una modesta tienda en San Francisco. 50 años después, la marca pensó que la alternativa Bread & Butter podía congregar a esa mezcla de perfiles urbanos, espíritus libre y rebeldes que se identifican con su filosofía de traspasar los límites. La propuesta en su stand aglutinaba la invitación a la exploración conjunta de la naturaleza, la moda, el diseño y la música. El rocódromo era la piedra angular del stand; una vez conquistado, los visitantes accedían escalando a la zona superior del stand donde podían llevar una edición limitada del modelo mítico de plumífero de la marca. La experiencia se completaba con djs en directo y sesiones de customización de prendas.
Teatro en una feria inmobiliaria
La oferta viviendas de Sareb se presentó en la pasada edición de la feria Barcelona Meeting Point con un stand que simulaba el interior de una casa, donde el eje principal, el salón, estaba presidido por una pantalla de cinco metros simulando un gran ventanal, que conectada a un iPad, el personal de atención podía seleccionar los vídeos en función de las necesidades de los visitantes haciendo cambiar el entorno. A parte de esta ambientación en el stand se desarrollaron pases de microteatro, el Microteatro Sare, donde se desarrollaron distintas historias de familias, parejas, etc. y sus historias alrededor de una vivienda. La agencia TBWA creó tres obras de teatro inspiradas en los tres mercados principales de Sareb: Efecto Costa, Efecto Nueva Vida y Efecto Ahora o Nunca. Un contenido de entretenimiento en el mismo stand en varios pases diarios que funcionó como reclamo de público, que se quedaba hasta el final de la representación para conocer el desenlace de las historias. La magia del teatro hizo que durante los cuatro días 960 personas se acercaran al stand llamados por las representaciones.
Viralización en un descapotable de SIXT
En la pasada edición de FITUR la marca de alquiler de coches SIXT aprovechó el espacio exterior entre pabellones de IFEMA para montar una acción que también atrajera público a su stand y a la vez fomentara la participación del asistente en redes sociales.
Con un corner exterior en el que se colocó un Audi S5 Cabrio de la flota y una trasera de paisaje, se montó un photocall en el que se simulaba conducir con la melena al viento ya que enfrente había un cañón de aire que soplaba con fuerza un chorro de aire produciendo un efecto de ‘cara distorsionada’ como se siente en el interior del descapotable. Un sistema automático de fotografía realizaba una instantánea que se recibía automáticamente a través del correo electrónico del visitante.
Con el hashtag #rutaSIXTYySIXT los visitantes podían etiquetar su foto en el coche y compartir en redes sociales. Al viralizar la imagen podían pasar por el stand ubicado en el interior del pabellón y recoger un pequeño obsequio, además de participar en un premio de 1.000 € en alquileres con SIXT.
Echar unas canastas en la Madrid Games Week
Last Lap ideó para el stand de PlayStation en la Madrid Games Week un espacio ‘paraguas’ con diversas zonas en las que se desarrollaban actividades y activaciones diferentes en cada una. Se trataba de segmentar el stand en diferentes zonas y colocar en cada una de ellas algo que llamara la atención del público.
Por ejemplo, había una zona dedicada al juego NBA, en el que se fundía lo virtual con lo real: una cancha de baloncesto urbana en la que se podía probar el juego, pero también se podía disfrutar de una exhibición de basket real o de raperos en directo.
Había también una zona dedicada a Kingdom Hearts en la que el público podía hacerse un selfie con una habitación con muebles gigantescos, lo que hacía que el espectador, al hacerse la foto, pareciese un juguete al lado de ellos.