A 110 Km. /hora… y ahora ¿como se lo digo?

Pues si, menuda faena y ahora ¿cómo se lo digo?

Para armarme de valor, me tome un café bien caliente, puse un poco de música y encendí un par de velas mientras pensaba cual era el mejor momento para darla tan mala noticia.

Al final decidí bajar al garaje y allí estaba ella, tan maravillosa como siempre, tranquila bien segura de si misma, con las mismas ganas de salir a hacer kilómetros, la da igual que llueva, que haga frió, bueno si nieva eso ya es otra cosa, pero creo que si fuera por ella también volaría por encima de la nieve…

Me senté en el suelo a su lado, me quede ensimismado, estaba nervioso, antes de comenzar a hablar respire hondo,… note que ella comenzaba a impacientarse, Martina,   tengo que decirte algo, dentro de poco ya no veras esos carteles que ponen velocidad limite 120  Km. /hora, ahora pondrá 110  Km. /hora…

Por un momento nos quedamos los dos en silencio, pero ella me sorprendió una vez mas, me miro y dijo… mejor ¿no?, así podrás detenerte a oler la tierra mojada, así podrás disfrutar del paisaje, ver como se mueve todo lo que tienes a tu alrededor y bueno, tomaras aun mas precaución…

Y yo que llevaba varios días ofuscado, pensando en que hay normas que solo valen para darse uno publicidad, resulta que a ella no le importaba…

Salimos los dos por la puerta del garaje quizás más tranquilos que nunca disfrutando de todo lo que nos rodeaba….

A veces, de decisiones a mi entender difíciles de digerir, surgen ideas, oportunidades, y porque no, una buena razón para que nuestro próximo evento, tenga el  “110” como hilo conductor.

Ni que decir tiene que Martina… es así como se llama mi moto.

Y tú ¿se lo dijiste?