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Uno de los aspectos que nos ha llamado la atención han sido las grandes gradas que ascendían diagonalmente desde el suelo, dando la impresión de estar suspendidas en una impactante efecto visual. Hemos hablado con Nussli, la empresa encargada del diseño, construcción y montaje de las gradas, y nos han dado algunos datos casi tan impresionantes como las gradas en sí.

Unas 3.300 toneladas de material, 190 camiones, seis semanas de montaje y 120 operarios sumados a cuatro meses de planificación, 20 tribunas (dos de ellas cubiertas), 5 puentes peatonales, cabinas para comentaristas y diversas plataformas para fotógrafos. Una gigantesca estructura que permitió que más de 85.000 espectadores disfrutaran de las carreras.

Una obra de estas características exige grandes empresas con capacidad para ejecutarlas. «Además de las altas exigencias en cuanto a la precisión y la rapidez, el tener una logística eficiente es algo decisivo», comenta Martin Schläpfer, jefe del proyecto.

Una curiosidad es que el diseño de estas estructuras de Nussli le permite instalar gradas prácticamente en cualquier lugar y tipo de terreno, incluso en agua, así como adaptar su forma a la requerida por el escenario ideado en el evento.