#CAFYDCHALLENGE, el evento deportivo presencial que marcó su futuro

Cada año la Universidad Francisco de Vitoria apuesta por los eventos y organiza el #CAFYDCHALLENGE. Hasta el momento, la organización había corrido a su cuenta pero este año decidieron contar con una agencia. Al fin y al cabo es la que asegura profesionalidad, la que se puede responsabilizar de la aplicación de las normas, tener personal formado para ello y procesos muy integrados.

Así, The Market Room organizó durante dos jornadas un evento en el campus de la Universidad para los 30 candidatos. El programa combinaba charlas motivacionales con actividades deportivas tanto individuales como en equipos reducidos: windsurf, skate, kung fu, crossfit… También pasaron un día en el pantano donde se puso a prueba su estrategia y orientación. Mientras ellos corrían de un lado a otro, un jurado les evaluaba para elegir finalmente en el acto institucional en el auditorio a los 8 ganadores de las becas.

Organización de un evento con medidas de seguridad

La agencia The Market Room nos cuenta que han creado un protocolo para todos los eventos que organizan denominado “LE COMMISIONER”. Al regalo welcome habitual (camisetas, mochilas…) se sumó un kit de seguridad: mascarilla, guantes y toallitas. Cada día se les tomaba la temperatura y se usaba gel hidroalcohólico. “Fue todo muy digital, por ejemplo: eliminamos cualquier tipo de proceso de registro o firma en papel”, nos cuentan.  Además, el catering fue repartido individualmente, no tipo buffet como otros años. Y nos aseguran que previamente y durante el desarrollo de las actividades se desinfectaban los materiales.

También se realizó una reducción de aforos al 50% tanto para los autobuses al pantano (usando además el mismo sitting en ambos trayectos) como para el acto institucional en el auditorio donde se revelaron los ganadores.  Allí se permitieron dos familiares por estudiante sentados con dos asientos de diferencia respecto a otras familias. La distancia de seguridad se recordó, como nos cuentan, mediante señalética y personal durante todo el evento, aunque pese a la separación no faltó la emoción de la competición y de la victoria.