Cruzcampo involucra a 3.000 cordobeses en su acción de street marketing
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La guitarra fue instalada en el bulevar Gran Capitán, en pleno centro de la ciudad e inaugurada a la vez que el Festival. Todo el mundo podía tocarla: solo hacía falta ponerle «su arte» experimentando con el instrumento.
De hecho un sistema de confonía registraba el movimiento del cuerpo de la persona, que tocaba la guitarra dando saltos de una nota a otra. Era de esta forma que se creaba la melodía. Como recuerdo de la experiencia, a los visitantes de la activación se les regalaba una «camiseta guitarra» diseñada de propio para la ocasión.
Finalmente, un comando compuesto por seis azafatas y un actor visitaron 42 bares donde se consumía cerveza Cruzcampo y, a través de una coreografía de estilo air guitar, acercaban el festival y el arte de la guitarra a todos los lugares donde la marca tiene presencia.
