Innovación, design thinking y mucho networking en los encuentros del Club Eventoplus

Comenzamos jugando a las casitas. Sí, no es broma. La primera activación consistió en intentar dibujar, en dos segundos, la imagen de una casa; en otros dos segundos, otra casa diferente… y así hasta seis dibujos distintos, para descubrir cómo funciona nuestra mente cuando pensamos en cosas comunes, conocidas y cercanas. Romper la barrera asociativa (que define nuestros códigos de lenguaje aprendidos) es el primer paso para innovar y crear algo diferente o resolver problemas complejos. También construimos torres de papel (trabajo en equipo) e investigamos al estilo CSI, para conocer mejor a nuestro cliente, ponernos en sus zapatos, investigarlo y así satisfacer realmente sus necesidades. Y ¿cómo lo hicimos?: creando un mapa de la empatía.

La presentación y moderación estuvo a cargo de la empresa Thinkers-Co: César Delgado, en Madrid, y Rafael Zaragozá, en Barcelona nos ayudaron a trabajar con estas metodologías para poder aplicarlas también a los eventos. Y es que para esto no es imprescindible ser diseñador; más bien hay que hibridar dos tipos de pensamiento: uno más analítico y otro más intuitivo. Sabemos que la innovación no solo va de tecnología, esta no puede limitarnos, porque el límite está en las personas. Primera conclusión: no diseñes para las personas, sino con las personas.

El design thinking nos puede ayudar a crear eventos más innovadores y mejorar la experiencia del asistente. ¿Cómo podemos aplicar esta metodología a nuestros eventos?. Te contamos un resumen de los pasos a seguir y algunos aprendizajes:

Mapear. Lo primero, tenemos que definir a nuestro usuario: el asistente a un evento. El objetivo es mejorar su experiencia, que depende del objetivo perseguido por cada uno cuando va a un evento y de los diversos perfiles de participante que pueden acudir. Hay que identificarles bien y considerar sus características para satisfacer necesidades y expectativas.

Explorar. Investiga, experimenta y luego sintetiza. Para ello la clave está en sacar muchas ideas para después acotar y poner foco en la que nos conviene. De este modo, no mataremos moscas a cañonazos dejándonos llevar por una idea llamativa, pero desproporcionada. Hay  que ajustarse a los recursos que tenemos y crear valor para alguien (innovación).

Construir. Antes de embarcarte en esa idea innovadora que has tenido, genera un prototipo con el que puedas analizar cómo funcionaría para ver si tiene fallos o hay que mejorarlo con nuevas ideas. Si lo aplicamos al evento podemos empezar por nuevas experiencias, pequeñas y ágiles, para probarlas rápidamente en el evento y corregirlas si es necesario.

Testear. Utiliza el feedback de los asistentes para comprobar si la idea, el diseño y la implementación han tenido un impacto positivo. Con esa información podrás comenzar de nuevo el proceso, mejorando e inventando nuevos eventos.

En Madrid, el desayuno de trabajo fue en El Paracaidista, un multiespacio vanguardista en Malasaña que se llenó con 50 miembros del club ávidos de conocimiento y ganas de compartir.  Y en Barcelona pudimos celebrarlo en un nuevo espacio espectacular, el hotel SB Glow y disfrutar de un buen afterwork en su terraza.

Queremos agradecer el apoyo a los sponsors del Club, Meliá Hotels International, Losberger De Boer y Costa Cálida, por su soporte incondicional. Como ya es habitual en el Club, las azafatas eran de Hands 4 Events. Y las fotos las hicieron nuestros fotógrafos Jesús Antón (Madrid) y Gerard Franquesa (Barcelona).

Las próximas citas serán en diciembre, así que… únete a nosotros y a otros locos/as por los eventos al Club eventoplus.