¿La gente querrá volver a viajar? Sí… pero con sus condiciones

La buena noticia: vuelve el viaje corporativo. El informe destaca la importancia de la presencialidad en las reuniones de negocio. El 98% de los viajeros de negocios españoles están dispuestos a retomar los viajes en los próximos 12 meses ¿Por qué? Existen tanto objetivos profesionales como personales. Por una parte, alegan que quieren viajar para establecer conexiones personales con clientes y colegas, desarrollar y mantener conexiones empresariales, y firmar nuevos contratos. Quien no viaje se perderá el tren (si nos perdonas esta metáfora dudosa): el informe destaca que “Los empleados creen que los negocios se verán afectados si las empresas no incrementan los viajes por trabajo el próximo año”. Profesionalmente buscan ganar más dinero, avanzar en su carrera profesional, y experimentar nuevos lugares. Cuidado, no lo digamos mucho pero a nivel personal el viaje parece ser también un cambio comparado con la rutina: el 43% quieren viajar para experimentar nuevos lugares (49%) y descansar de su vida diaria (43%). Podemos dar a este doble dato una dimensión profesional, viéndolo como un factor de satisfacción y fidelización… 

… pero con flexibilidad. Estas son las condiciones para dos tercios de los encuestados: tener más control en sus viajes. Quieren poder elegir el alojamiento y el medio de transporte (por ejemplo, utilizar su coche personal en vez de transporte público), alojarse en hoteles más grandes y evitar escalas. De forma interesante, asumen que son ellos mismos los responsables de su salud y su seguridad en el viaje, un punto de vista sorprendente en una sociedad que ve las empresas como absolutamente protectoras.

El reto para los travel managers. En este contexto los travel managers tendrán un papel más estratégico y deberán garantizar que las políticas de las empresas se ajusten a las expectativas de los empleados. Las medidas que tomen las empresas en los próximos 12 meses pueden determinar su capacidad para adquirir y retener a sus plantillas, en un año que es estratégico en la recuperación del negocio. De hecho, el 99% percibe mayor dificultad en su trabajo respecto al año pasado, con retos como comunicar y garantizar el cumplimiento de las políticas de viaje nuevas y revisadas de la empresa, los cambios o cancelaciones de última hora en las reservas y los cambios en la normativa gubernamental.

Obviamente no se pueden aplicar a la letra estas conclusiones en eventos (no cada asistente a tu convención elegirán su hotel) pero dar opciones de personalización y de flexibilidad son demandas fuertes, que el profesional de eventos tendrá que tener en cuenta. De momento, celebremos que vuelve el viaje; la reunión de 15 personas en cada ciudad, que hemos visto en esta primera fase de la recuperación, se convertirá ahora en eventos más grandes y lejanos.