Icónica Santalucía Sevilla Fest: un festival que ya forma parte del ADN de Sevilla
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Ingrediente nº 1: Aprovechamiento del entorno histórico
Uno de los mayores aciertos del Icónica Santalucía Sevilla Fest es su capacidad para realzar la belleza arquitectónica de la Plaza de España, construida para la Exposición Universal de 1929. Los organizadores han comprendido que el valor visual e histórico del entorno es uno de sus mayores activos, y han diseñado un montaje técnico que respeta y complementa la estética del lugar. La iluminación artística juega un papel fundamental en la escenografía, destacando los detalles de la arquitectura renacentista y mudéjar. Este enfoque requiere una planificación cuidadosa para integrar los elementos del evento, como la iluminación y la escenografía, de manera que no compitan con el patrimonio, sino que lo resalten. Al hacerlo, se consigue una experiencia visual impactante que, además, respeta el entorno, manteniéndolo intacto para las generaciones futuras.
Ingrediente nº2: Fusión de música, gastronomía y patrimonio
El Icónica Santalucía Sevilla Fest ha ido más allá del tradicional concierto al aire libre, transformándose en un festival experiencial. En los últimos años, eventos de este tipo han incorporado otros elementos como la gastronomía, fusionando música en directo con experiencias culturales completas; como ya pudimos ver en eventos como el Sónar. En este caso, la gastronomía y el patrimonio arquitectónico se combinan para ofrecer una experiencia multisensorial, uniendo la música con lo mejor de la oferta culinaria local en un entorno típico. Para ello, el festival habilitó una zona destinada a lo puramente gastronómico: The Village. Esta localizaciones albergaban dos partes en las que podías elegir disfrutar de una cena más informal en varias estaciones de comida con el Mercado Gourmet situado a lo largo del paseo de Isabel la Católica o una degustación a la carta sentados mientras se disfruta de la música en el Restaurante que se sitúa junto a la Torre Sur de la emblemática plaza.
Ingrediente nº 3: Infraestructura flexible y estética
Uno de los aspectos clave que ha caracterizado al Icónica Santalucía Sevilla Fest es la complejidad en el montaje técnico. Pepe Ramírez, director de RRPP y protocolo del festival, subraya que la infraestructura ha sido diseñada para ser funcional y estéticamente compatible con la Plaza de España. El equipo técnico se ha esforzado en encontrar el equilibrio perfecto entre la comodidad del público y la preservación del entorno histórico, sin que los elementos necesarios para el desarrollo del evento interfieran con la apreciación del espacio.
Este montaje técnico ha sido reconocido a nivel internacional, y es uno de los puntos fuertes de la candidatura del festival a los Premios eventoplus. La atención a los detalles, como las barras, el photocall e incluso las catenarias, que siguen criterios estéticos acordes con la plaza, demuestra un respeto absoluto por el entorno patrimonial.
Ingrediente nº3: Impacto económico
Además de su éxito artístico y cultural, el Icónica Santalucía Sevilla Fest ha tenido un impacto económico notable en la ciudad de Sevilla. En su edición de 2023, generó más de 70 millones de euros y atrajo a más de 100.000 asistentes, de los cuales 46.000 eran de fuera de la provincia y 15.000 del extranjero. Este valor se ha incrementado más del doble este año 2024, alcanzando cifras de 214.000 asistentes. Este impacto no solo ha beneficiado al sector turístico y hostelero, sino que también ha creado más de 700 empleos directos y 1.800 indirectos, situando al festival como el tercer evento más relevante de la ciudad, después de la Semana Santa y la Feria de Abril, las dos semanas grandes de Sevilla.
Ingrediente nº4: Cuidado del entorno patrimonial
Organizar un evento de esta envergadura en un espacio patrimonial como la Plaza de España implica grandes desafíos. La plaza, que cuenta con casi 100 años de antigüedad, incluye elementos de gran valor histórico, como la balaustrada de cerámica, los azulejos dedicados a las regiones españolas y la fuente central, todos ellos susceptibles de sufrir daños si no se manejan con el debido cuidado.
Ramírez comparte que uno de los mayores retos es la presencia de la fuente central, un elemento que, aunque contribuye al encanto del lugar, dificulta la logística y la visibilidad en el festival. Cada edición cuenta con la evaluación de Patrimonio Nacional, que autoriza el uso del espacio tras realizar inspecciones exhaustivas para garantizar su integridad.
El éxito del desarrollo del festival en un enclave histórico como este se basa en tres pilares: la conservación del espacio, la reparación de los posibles desperfectos y la integración estética del montaje con el entorno. La organización no solo se esfuerza en preservar el lugar, sino que también colabora activamente con las autoridades para identificar y restaurar cualquier desperfecto, lo que convierte al Icónica en un modelo de responsabilidad en la gestión de eventos en entornos patrimoniales, favoreciendo con su paso la conservación del lugar.