Grupo MAS monta un parque de atracciones en La Cartuja

Por 50 MAS Festival fue la fiesta ideada por la agencia Eferson para dar la bienvenida al 50º aniversario de Grupo MAS. Con esta celebración, que iba dirigida a sus más de 4000 trabajadores (procedentes de más de 80 localidades de Andalucía y Extremadura) la empresa buscaba “hacer sentir a todos los trabajadores de Grupo MAS parte de una familia y de una historia, generando una jornada de encuentro y convivencia”, tal y como explica Enrique Fernández, CEO de Eferson. El espacio escogido para el evento fue nada más y nada menos que la casa de los sevillistas: el estadio de La Cartuja, un venue perfecto teniendo en cuenta el numeroso grupo de asistentes y su situación estratégica dentro de la ciudad.

Aunque el principal motivo del evento era el cumpleaños de la empresa, también había otros grandes hitos que se querían festejar: que la familia de Grupo MAS sigue creciendo, el estreno de un nuevo centro logístico y que este año han recibido la Medalla de Andalucía. ¿Y qué mayor gran evento de celebración, en el que se exalta la alegría, hay que un festival?

Un campo de fútbol convertido en parque de atracciones

Para que los asistentes comenzasen a vivir la experiencia del evento incluso antes de acceder al campo del estadio, el túnel de acceso al terreno de juego fue transformado en una especie de túnel del tiempo “donde, en forma de tótems, se plasmaron los principales hitos históricos de la compañía en estos 50 años; acompañado de iluminación robotizada y música épica», apunta Fernández. Al entrar en el campo, los participantes recibieron una especie de pasaporte que, además de contener un mensaje del presidente de la compañía dirigido a los empleados, incluía un mapa con indicaciones y detalles de lo que podrían encontrar en el recinto. Igualmente, cada pasaporte contaba con una página personalizada con un número que les permitiría participar en una tómbola con casi 500 regalos.

¿Cómo se consiguió trasladar a los asistentes esta emoción de felicidad que quería trasmitir la compañía? Convirtiendo La Cartuja en un parque de atracciones. Junto con la ayuda de MontiPark-Atracciones Montiel, en este espacio se instauró una pista de coches de choque de más de 30 metros, la más grande de Andalucía. El festival también contó con un futbolín humano y multitud de barracas de juegos de azar tradicionales: dardos, pesca de patos, canastas… Igualmente, con la ayuda de diversos partners se incorporaron otras curiosas actividades, como un mobiliario para jugar al fútbol sentado mientras estaban tomando algo o divertidos juegos de habilidad repartidos por el espacio.

Otros de los atractivos del festival fueron la feria gastronómica y la tómbola. La base alimentaria a partir de la que gira los servicios de Grupo MAS es lo que motivó que la celebración contase con este carácter gastronómico. En la celebración de esta feria se incorporaron productos frescos y materias primas especialmente seleccionadas en base a las marcas y partners del propio grupo en sus supermercados. Por otro lado, “la organización de la tómbola a nivel interno fue desarrollada por el propio cliente, quien nos trasladó el reto de cómo sortear casi 500 regalos a lo largo de la jornada”, comenta el CEO de Eferson. “Los premios más esperados fueron los finales: viajes a Punta Cana, motos y un coche”.

El punto musical, de la mano de artistas andaluces

¿Qué elemento no puede faltar en un festival? La música. Los grupos andaluces Siempre Así, La Bizarrería, Los Mickis y Álex O’Dogherty se encargaron de amenizar la jornada sobre un escenario de 28×14 m. O’Dogherty, que también fue el maestro de ceremonias del festival, se encargó de conducir cada uno de los momentos de la celebración, incluyendo los diferentes discursos pronunciados por el presidente de la compañía y por los trabajadores de la empresa.

A través de este festival, se consiguió que los empleados del Grupo MAS se sintiesen dentro de la comunidad que conforma la empresa, haciéndoles entender que “la celebración de los 50 años no es cosa de unos pocos, sino de todos. El evento consiguió crear sentido de pertenencia y sobre todo, un recuerdo que perdure durante muchos años en todos los que vivieron la jornada”, subraya Enrique Fernández.