Skip to content
Eventos corporativos · Andalucía

La Solheim Cup 2023 aterriza en España por primera vez

La Solheim Cup 2023 aterriza en España por primera vez

Compartir noticia

5 min. de lectura

Escuchar

Gala Alberdi
Furor de nuevos hotelazos en España: ¿los conoces? Nace ‘Dentsu Creative Iberia’, nueva agencia creativa en España y Portugal San Valentín: un laberinto de pasiones… ¡y de eventos!
La Solheim Cup se celebró por primera vez en España el pasado mes de septiembre. Un gran evento que reúne a las doce mejores golfistas europeas y las doce mejores estadounidenses en un ambiente propio de una Final de Mundial. Porque realmente, a pesar de que solo compiten dos continentes, hablamos del mayor acontecimiento de golf femenino existente.

Pues bien, en noviembre de 2019, la agencia Deporte & Business -D&B-conseguía hacerse con los derechos de este evento para su edición de 2023. Y Finca Cortesín, un resort situado a caballo entre Marbella y Sotogrande, se eligió como sede del evento.

Deporte & Business fue la empresa encargada de la producción y comercialización del evento de principio a fin: desde la búsqueda de patrocinadores, la venta de entradas, la gestión con turoperadores, campañas de comunicación, producción y montaje del evento, que desde hace más de 20 años está focalizada en el golf profesional femenino. El contrato se firmó cuatro años antes de que sucediera el evento, y a pesar de la pandemia sobrevenida poco después, la cual disminuyó las opciones comerciales sensiblemente, el evento consiguió desarrollarse.

Zona hospitality y área de merchandising

Hubo básicamente un área en la que D&B se apoyó en una empresa externa especializada: la hospitalidad VIP. La estadounidense Jet Set Sports, especializada en el hospitality de los Juegos Olímpicos desde hace más de 30 años, fue la empresa seleccionada para gestionar la experiencia VIP. El área de merchandising, por ejemplo, fue un departamento que inicialmente se dejó en manos de una empresa especializada, la cual cinco meses antes del evento cayó en suspensión de pagos, por lo que D&B optó por asumir el reto de gestionarlo directamente. Tan solo la parte deportiva se mantiene en este evento en manos del circuito europeo -LET-, quien asume la responsabilidad de supervisar el estado del campo, prepararlo para la competición, y realizar las tareas propiamente deportivas (arbitraje, set up del campo).

Un evento deportivo con una parte experiencial importante

El evento estaba muy dirigido a la parte experiencial , y en ésta su primera edición española, lo fue aún más, ya que a las experiencias deportivas propias de la competición -el tee del 1 con su ambiente festivo, las gradas a rebosar de aficionados jaleando a su equipo, y el espectáculo deportivo en sí, con las jugadoras celebrando efusivamente cada golpe- se le añadieron experiencias culturales, tanto dentro como fuera del campo, para que el espectador, especialmente el extranjero, pudiera disfrutar de la Costa del Sol y de Andalucía en todo su esplendor: cenas gastronómicas, música en directo, conciertos, exhibiciones culturales -como la exposición “Batacola” a cargo del diseñador Manu Fernández-, y hasta la pasión andaluza y española desplegada por las embajadoras del evento, muchas de las cuales se vistieron de flamencas incluso en el campo, otorgando un vistoso colorido a un evento ya de por sí festivo.

Uno de los aspectos que destacó a nivel experiencial entre los VIPs fue la ubicación y diseño de la carpa de hospitalidad: situada entre los hoyos 16 y 17, con vistas incluso al 18, abierta por los cuatro costados y con una gran terraza en altura, constituía el lugar idóneo para vivir en directo el desenlace de los partidos. Este detalle, que podría parecer de escasa importancia sobre el papel, supuso un nivel de satisfacción entre los VIPs muy por encima de lo habitual en este tipo de evento -suelen ser carpas cerradas sin vistas al juego-, ya que en todo momento formaron parte del ambiente del campo.

Retos de montaje

La orografía y la singularidad de Finca Cortesín resultaban complejas a la hora de montar un gran evento: por un lado, los desniveles que había que superar para el montaje de carpas y gradas resultaban complicados; a eso había que añadir la densidad de vegetación, la cual no debía verse dañada por las estructuras temporales; y por último, la cercanía de las viviendas de lujo hacían que los horarios de montaje fueran reducidos. En el caso de algunas de las carpas que se montaron en el campo, los materiales tuvieron que acarrearse de forma manual, ya que las máquinas no podían acceder hasta su ubicación definitiva.

Todo esto hizo que los tiempos de montaje se ampliaran casi un mes más de lo previsto inicialmente sobre el papel. Sin embargo, la colaboración de todas las partes implicadas hizo que se llegara a tiempo y sin sufrimientos. Otro de los retos superado fue el de la vegetación: debido a las especies cespitosas utilizadas en Finca Cortesín, las cuales requieren de menos recursos hídricos que la generalidad, así como a la vegetación autóctona que decora el entorno, hicieron que, tras el desmontaje del evento, el paisaje del campo se recuperara rápidamente sin sufrir consecuencias ulteriores.

Andalucía: la atracción turística para los estadounidenses

Los resultados del evento llegaron antes incluso de que hubiera ocurrido: Andalucía y la Costa del Sol se habían embarcado en este proyecto con el fin de abrir una ventana turística al mercado estadounidense, y más concretamente a los turistas de golf provenientes de América. Este objetivo se había cumplido antes incluso de abrir las puertas de la Solheim Cup, ya que la cifra creciente de visitantes americanos se había dejado sentir desde el momento del anuncio en octubre de 2020. Durante la semana de la Solheim Cup, 65.000 espectadores acudieron a Finca Cortesín, de los cuales un catorce por ciento procedían de USA, un treinta y tres por ciento procedían de Reino Unido e Irlanda, y un diecisiete por ciento del resto de Europa. Tan solo un treinta y cinco por ciento eran nacionales. Y más de la mitad eran mujeres.

El evento en datos

La Solheim Cup española ha sido la más vista de la historia: la web ha superado los cuatro millones de visitas (más de un millón de usuarios únicos), la señal de televisión ha alcanzado más de 460 millones de hogares en 144 países; las redes sociales oficiales han generado más de 20 millones de visualizaciones de vídeos; las audiencias de RTVE alcanzaron picos de 177.000 espectadores; Golf Channel generó 15 millones de minutos en vivo en streaming, más del 250% desde la última edición de 2021. Los datos hablan solos. Y los apoyos presenciales también: a iconos deportivos como José María Olazabal o Pau Gasol, se unió SM El Rey Felipe VI, quien acudió a presenciar la jornada final de la Solheim Cup, que, para redondear su éxito, tuvo a la navarra Carlota Ciganda como gran protagonista de la victoria europea.

Noticias relacionadas

Ver todas las noticias
Eventoplus